Entérate en qué consiste este procedimiento médico que ayuda al diagnóstico de hemorroides.
La anoscopia es un procedimiento médico útil en el diagnóstico de hemorroides, sobre todo, cuando el tacto rectal no ha sido concluyente, en ocasiones, cuando se trata de hemorroides internas, indoloras y sangrantes, este recurso ayuda a verificar las condiciones de esa zona.
Según, información del National Center for Biotechnology Information de la National Library of Medicine de Estados Unidos, hasta el 50% del sangrado rectal se puede atribuir falsamente a las hemorroides sin un examen interno para confirmar este diagnóstico, de ahí su importancia.
De esta forma, la anoscopia ayudará a visualizar:
- El ano.
- El canal anal.
- El esfínter interno.
¿En qué consiste la anoscopia?
Este procedimiento se realiza generalmente en el consultorio médico o una clínica ambulatoria y dura entre 10 y 30 minutos. Consiste en introducir un tubo pequeño llamado anoscopio, el cual permitirá observar el revestimiento del ano y el recto.
Cabe señalar, que el anoscopio posee una lupa y una luz para que el médico pueda verificar si hay alguna anomalía. Y si bien, no todos estos dispositivos cuentan con luz, se puede asistir el procedimiento mediante una fuente de luz aparte.
Para realizar una anoscopia es necesario que el paciente se coloque en posiciones como las siguientes:
- Decúbito lateral (recostado de lado) con una pierna flexionada, que es la más común.
- Decúbito prono, es decir, recostado boca abajo con la cabeza de lado.
Por lo general, el médico realizará primero un examen rectal con los dedos para asegurarse de que ninguna masa o tejido se encuentre obstruyendo el canal anal, a fin de prevenir alguna lesión al introducir el anoscopio.
Asimismo, aplicará gel lubricante soluble al agua en el propio anoscopio antes para facilitar la inserción. También puede usar lidocaína como anestesia local en caso necesario.
El procedimiento suele ser indoloro, sin embargo, es probable sentir incomodidad al finalizar la revisión, así como sentir que se tienen ganas de defecar, pero es normal.
¿Cómo es la preparación para este examen médico?
Por lo regular, no se requiere de preparación para una anoscopia. Sin embargo, se suele recomendar ir al baño ya sea para vaciar la vejiga o hacer popó a fin de que el procedimiento sea más cómodo.
Según sea el caso, el médico puede indicar algunas otras instrucciones especiales.
Cabe mencionar, que la anoscopia, además de ayudar a determinar el diagnóstico de hemorroides, sirve para checar otros problemas en la zona rectal como son: fisuras anales, pólipos anales, proctitis, diverticulosis y cáncer.
Asimismo, el médico deberá orientar y considerar las limitaciones de este procedimiento, así como la necesidad de otros estudios, de acuerdo con el estado de salud de cada paciente.
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