¿Te has puesto a revisar tus hábitos? Sueles pasar mucho tiempo sentado o de pie, no comes bien, te malpasas, tu dieta carece de fibra y/o casi no tomas agua… ¡Cuidado! Este tipo de hábitos puede aumentar el riesgo de que sufras hemorroides o si ya las tienes, puede agravar el problema.
Entre los factores que influyen en el desarrollo de problemas en las hemorroides, también conocidas, popularmente como almorranas, se encuentran:
- Sedentarismo.
- Malos hábitos alimenticios.
- Estreñimiento.
Estas condiciones, en conjunto suelen favorecer que el metabolismo sea lento y que se tengan alteraciones a nivel digestivo. Así, por ejemplo, alteraciones como el estreñimiento, puede deberse, principalmente, a la baja o nula ingesta de fibra y de suficientes líquidos, esto produce evacuaciones intestinales poco frecuentes con heces duras, aunado al esfuerzo para la defecación, que conlleva a un trastorno en la presión venosa rectal, pasajera o crónica, propiciando la formación de hemorroides.
Los especialistas, también incluyen al embarazo, parto, sobrepeso u obesidad, diarrea crónica, así como una predisposición hereditaria como causas de las almorranas. Así como también hábitos inadecuados como pasar mucho tiempo sentado en el escusado.
Para prevenir las hemorroides y sus complicaciones se recomienda una dieta rica en fibra, consumir frutas y vegetales, reducir alimentos que contengan alimentos fermentables (como la leche), una ingesta adecuada de agua y/o diferentes líquidos y realizar ejercicio.
Consulta a tu médico.
