Esta mañana, cuando te estabas bañando descubriste una bolita en el ano; ahora comienzas a entender por qué te has sentido tan incómodo al pasar mucho tiempo sentado y que probablemente es la razón por la que has tenido mucha comezón e irritación en esa zona. ¿Serán hemorroides? Conoce sus principales síntomas y sal de dudas.
Hemorroides, ¿cuáles son sus síntomas?
Este problema, también conocido como almorranas, es muy común y suele estar relacionado con un aumento de presión de la sangre en las venas hemorroidales del recto y ano. Esto puede ocurrir durante el embarazo o el parto, en el caso de muchas mujeres, y debido al estreñimiento.
Los problemas de hemorroides pueden tener varias causas, como las que se mencionaron anteriormente. Y como se puede observar, un común denominador de estos factores es que se presenta una alteración en la presión de las venas del recto y esto altera la estructura de las hemorroides, es decir, se dilatan.
De esta manera, entre los principales síntomas de hemorroides se encuentran:
- Inflamación.
- Comezón o irritación.
- Dolor y malestar, sobre todo al sentarse.
- Un bulto cerca del ano, que puede ser sensible o causar dolor.
- Sangrado en ocasiones, con o sin dolor (pequeñas manchas de sangre de color rojo brillante en el papel higiénico o en el inodoro).
¿Cómo se diagnostican las hemorroides?
Además de los síntomas mencionados, el médico debe realizar una revisión en su consultorio. También te puede preguntar sobre algunos aspectos relacionados con tus hábitos alimenticios y en general, de tu estilo de vida.
Todo lo cual, le servirá a tu médico para saber los factores de riesgo que puedes tener para sufrir hemorroides, por ejemplo, si tienes estreñimiento frecuentemente, si tu consumo de fibra es muy bajo o nulo, si tomas pocos líquidos, entre otros.
Asimismo, puede solicitar o realizarte algunas otras pruebas para confirmar que efectivamente, se trate de hemorroides, descartar otras afecciones y prevenir mayores complicaciones.
Sobre todo, si se sospecha de hemorroides internas, te puede solicitar la realización de exámenes como los siguientes:
- Anoscopia, que se trata de una exploración endoscópica, fundamental para establecer el diagnóstico de las hemorroides, así como su grado de prolapso. Se recomienda diagnosticar hemorroides internas en grados tempranos.
- Colonoscopia, es un examen exploratorio que se realiza en pacientes sobre los 50 años, así como en aquellos que tengan antecedentes familiares o síntomas que ameriten su realización. No obstante, no es un estudio inicial que suela realizarse para diagnosticar los problemas de hemorroides.
Comienza a tratar y aliviar los molestos síntomas de hemorroides, no dejes pasar más tiempo. Atenderte desde las primeras molestias puede ayudarte a prevenir complicaciones e incluso evitar una cirugía de hemorroides.
Cambios en tus hábitos y estilo de vida no solo pueden contribuir a que disfrutes de una vida más saludable, sino también te pueden ayudar a disminuir el riesgo de sufrir de problemas de hemorroides. Consulta AQUÍ más información sobre las hemorroides y cómo tratarlas.
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